Cuando el detective Florián Falomir es contratado para esclarecer el robo de una talla de la virgen que aparentemente no tiene ningún valor especial, no puede imaginar hasta qué punto se van a complicar las cosas. Pronto se verá envuelto en una trama vertiginosa cuya clave podría estaren los misteriosos sucesos de años atrás, cuando tres niños realizaron una serie de supuestos milagros tras una aparición mariana.
Las pistas conducirán a Falomir -un inolvidable investigador de origen armenio que merece un puesto de honor en elactual panorama del género negro- hasta la ciudad de Jerusalén, donde entrará en acción la inspectora Martina de Santo, el p ersonaje fetiche de Juan Bolea.
Una novela de intriga llena de sorpresas y giros inesperados en la que no faltan los toques de humor -blanco y negro- y un final extraordinario, a la altura de la originalidad del argumento.
De raíces andaluzas y aragonesas, Juan Bolea (Cádiz, 1959) vive en Zaragoza. Tras escribir varias novelas, dio inicio a la serie de la investigadora Martina de Santo con Los hermanos de la costa, título al que siguieron La mariposa de obsidiana, Crímenes para una exposición y Un asesino irresistible, todas ellas en Ediciones B.